Todas las entradas de: José Luis de la Fuente

Investigando para mejorar el diagnóstico de celiaquía.

El diagnóstico de la enfermedad celíaca es un proceso complejo que precisa diversos pasos.

Las lesiones de la mucosa sólo pueden confirmarse mediante la realización de una biopsia intestinal. No obstante, a partir de la sospecha clínica, el primer paso para el diagnóstico es la determinación en sangre de determinados anticuerpos, cuya ausencia permite descartar la enfermedad con un razonable margen de seguridad: esta determinación de anticuerpos permite realizar un cribado inicial, tras el cual seguir indagando si el resultado apoya la sospecha inicial.

Recientemente, la prensa se ha hecho eco de una nueva técnica, que describen como sencilla y no invasiva, para detectar estos anticuerpos a partir de sangre capilar. Su realización no precisa personal experimentado (aunque, lógicamente, su interpretación sí debe realizarse por personal sanitario), y ha sido desarrollado por científicos de la Universidad de Granada. Bastaría con una simple punción en el pulpejo de un dedo para obtener una gotita de sangre que se depositará en el dispositivo, obteniéndose una señal visual similar a la de un test de embarazo en caso de positividad (es decir, en caso de que los anticuerpos estén presentes).

Recientemente, María Vega Almazán Fernández de Bobadilla, investigadora del departamento de Pediatría de la Universidad de Granada, ha presentado los resultados de un trabajo en el que se utilizado la prueba en 198 niños (se trata de su tesis doctoral, dirigida por José Maldonado Lozano), confirmándose posteriormente la positividad de la misma en la unidad de Gastroenterología Infantil del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, donde se procedía a la realización de endoscopia y toma de biopsia en los casos confirmados. En ese trabajo se detectaron seis niños celíacos, lo que supone una prevalencia (en torno a 3 %) mayor que la estimada con carácter general para la población europea (que se asume en torno al 1 % aproximadamente).

Obviamente, esta prueba no es una alternativa al complejo proceso diagnóstico (de hecho, como hemos comentado, los casos positivos continuaban siendo estudiados en el Hospital Virgen de las Nieves), pero sí puede constituir, si el sistema da resultado, una forma de hacer el cribado inicial (detectar los anticuerpos en sangre) sin necesidad de extraer más sangre que una simple gotita, lo cual es una enorme ventaja especialmente en caso de niños pequeños. Un resultado positivo precisará confirmación con analítica de sangre y medición de los anticuerpos de la enfermedad por otros métodos, pero un resultado negativo permitirá descartar la enfermedad de un modo bastante seguro sin necesidad de seguir indagando.

blood

Paracetamol en el embarazo o lactancia y desarrollo posterior de asma.

El último número de la revista científica International Journal of Epidemiology (Revista Internacional de Epidemiología) incluye un artículo que ha llamado la atención de la prensa. Se llama «Prenatal and infant paracetamol exposure and development of asthma: the Norwegian Mother and Child Cohort Study» («Exposición a paracetamol prenatal y en la infancia y desarrollo de asma: el estudio noruego de cohortes de madres y niños«), y sus autores (encabezados por Maria Christine Magnus, del Instituto Noruego de Salud Pública) estudiaron la relación entre la exposición a paracetamol (acetaminofén) durante el embarazo (obviamente, por consumirlo la madre gestante) y en los primeros seis meses de la infancia y el posterior desarrollo de asma.

Como fuentes de información emplearon el estudio noruego de cohortes de madres y niños que se cita en el título del trabajo (con cuestionarios que incluyen datos de 95200 madres y 114500 niños) y una base de datos que recoge la prescripción de fármacos en el país (Noruega).

Utilizaron información de 53169 niños con diagnóstico de asma a los tres años de edad, 25394 niños con diagnóstico de asma a los 7 años de edad, y 45607 niños a los que se había prescrito tratamiento antiasmático a los siete años de edad: esas cifras demuestran que trabajaron con una muestra numerosa.

En palabras de la autora principal del artículo, «dado que el paracetamol es el analgésico más comúnmente utilizado por las mujeres embarazadas y los niños, el descubrimiento de sus potenciales efectos adversos es de gran importancia para la salud pública».

Encontraron una asociación modesta (ese es exactamente el término que los propios autores utilizan) entre el consumo de paracetamol por la madre embarazada o el consumo de paracetamol por el bebé en sus seis primeros meses de vida y el posterior desarrollo de asma. Es, ciertamente, una asociación muy modesta: detectaron un riesgo relativo de padecer asma a los tres años de 1.13 en caso de exposición prenatal al paracetamol (lo cual quiere decir que por cada niño que desarrollaba asma sin haber estado expuesto al paracetamol, 1.13 de los niños expuestos en el embarazo la desarrollaban) y de 1.29 en caso de exposición en los seis primeros meses (lo cual quiere decir que por cada niño que desarrollaba asma sin haber estado expuestos, 1.29 de los niños expuestos en sus primeros seis meses desarrollaban asma).

No es una diferencia muy grande. Es, simplemente, una llamada de atención para estimular a otros autores a seguir investigando sobre el tema.

Aunque podría pensarse que la enfermedad o motivo por el cual la madre tomara paracetamol en el embarazo podría ser la verdadera causa de esa asociación, los autores insisten en que tuvieron en cuenta ese factor, y la asociación (que, insistimos, no es especialmente llamativa) resultó independiente de la enfermedad o situación clínica que justificó el consumo del fármaco. En cualquier caso, como los propios autores reconocen, unos resultados tan poco concluyentes «no justifican un cambio en las actuales recomendaciones sobre el uso de paracetamol en las mujeres embarazadas».

Los autores también estudiaron (en el mismo trabajo) la posible relación del consumo precoz de ibuprofeno con el posterior desarrollo de asma, pero los resultados, en este caso, fueron incluso más modestos que en el caso del paracetamol.

Si quieres acceder al artículo completo, pulsa sobre la imagen:

baby-1426346614p4x7q