La Consejería de Salud y la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta de Andalucía, en colaboración con Vodafone, han lanzado un reto de innovación abierta bajo el nombre de «Reto Salud Andalucía«.
Se trata de un concurso para desarrollar una aplicación móvil (app) destinada a pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC). La aplicación deberá ir orientada a mejorar la adherencia y el cumplimiento terapéutico por parte de estos pacientes, lo cual, previsiblemente, tendrá un impacto positivo sobre la salud de los mismos.
Tal como se resume en la convocatoria, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es una enfermedad que se caracteriza por la presencia de limitación crónica, progresiva y poco reversible al flujo aéreo, asociada a una reacción inflamatoria anómala, debida principalmente al humo del tabaco. A pesar de ser una enfermedad grave y muy invalidante, se trata de un proceso prevenible y tratable. El incumplimiento y la falta de adherencia a los tratamientos son muy frecuentes, y contribuyen de un modo indiscutible a la mala evolución de la enfermedad, con empeoramiento de la calidad de vida e incremento de la mortalidad relacionada. Por ello, mejorar esta situación es un objetivo prioritario al cual va orientada este reto.
La propia convocatoria destaca algunas de las principales dificultades que encuentran los profesionales para que las personas afectadas por la EPOC sigan correctamente el tratamiento, entre las cuales están:
– Uso inadecuado de los inhaladores.
– Falta de continuidad en su empleo, ya sea por desconocimiento, de forma intencionada o errática.
– Incomodidad del propio tratamiento.
– Hay un número importante de estas personas que siguen fumando.
– Falta de motivación para hacer los ejercicios físicos en casa o en el parque.
– Dificultad para acceder al material necesario para hacer los ejercicios en casa: pesas, bicicletas estáticas, etc.
– Falta de aceptación por parte de estas personas del impacto que conlleva padecer esta enfermedad y de la importancia de las medidas que se les recomienda y/o prescriben.
Los organizadores del concurso proponen incidir sobre estas circunstancias, y citan de forma expresa, a modo de ejemplo, algunas posibles medidas.
– Fomentar la educación para la salud en el sentido de proporcionar a dichas personas información inteligible para mejorar las competencias y habilidades en salud.
– Que puedan y participen en la toma de decisiones.
– Facilitar la identificación precoz de las exacerbaciones.
– Mejorar la experiencia de uso de los inhaladores y la educación terapéutica.
– Evitar el sedentarismo y estimular la actividad física.
– Mejorar la percepción de seguir el tratamiento, aunque la persona no se encuentre mal a diario.
– Mejorar la motivación y los incentivos para seguir el tratamiento y corregir errores.
– Aliviar la sensación de falta de aire y contribuir a la mejora de la función pulmonar.
– Ayudar al control de síntomas.
– Facilitar la autoevaluación de la persona afectada: calidad de vida, visitas a urgencias en el último año, realización de ejercicio físico, reducción de exacerbaciones, etc.
– Mejorar el apoyo familiar.
– Facilitar la relación con el personal sanitario.
Pensemos una cosa: la obstrucción al flujo aéreo y la presencia de inflamación en los bronquios son circunstancias que esta enfermedad tiene en común con el asma. La diferencia (fundamental) es que en la EPOC la obstrucción es crónica, progresiva y poco reversible, mientras que, por el contrario, en el asma la obstrucción al flujo aéreo es, característicamente, reversible. En ambos casos las vías respiratorias pueden ser más vulnerables ante diversos estímulos irritantes presentes en el aire respirado (como el humo del tabaco o los contaminantes de la atmósfera). Los dispositivos empleados para conseguir que los medicamentos lleguen al interior de los pulmones (inhaladores) también son similares, o idénticos.
Y los problemas de falta de adherencia o incumplimiento, con consecuencias negativas importantes, también ocurren en el caso del asma.
Por ello, muchas de las medidas que se han mencionado arriba (mejorar la comunicación sanitario-paciente, educar adecuadamente en el uso de inhaladores, mejorar la motivación, ayudar a identificar precozmente las exacerbaciones, …) pueden tener también un impacto positivo sobre la salud de las personas asmáticas. Si padeces asma bronquial o tienes algún familiar que padezca esta enfermedad, puedes tener facilidad para identificarte con algunos de los problemas que padecen las personas con EPOC.
Puede participar en este reto cualquier persona física o jurídica mayor de edad que lo desee (particulares, emprendedores, empresas, centros de investigación, universidades, etc.), y el reto está abierto a propuestas individuales o colaborativas. Ser profesional de la salud no es un requisito para poder participar, por lo que puede deducirse que también los pacientes, o sus familiares, desde su propia experiencia, pueden hacer propuestas.
Se concederán premios por un importe global de 30.000 euros, además de la posibilidad de validar la aplicación en el Sistema Sanitario Público de Andalucía. Lamentablrmente, en las bases de la convocatoria no queda muy claro cuántos premios se otorgarán, ni cómo se distribuirá la cantidad total entre los mismos. Tan sólo se concreta que las propuestas serán evaluadas por un jurado compuesto por miembros de la comunidad científica y tecnlógica, del sector público y privado.
Pero si tu idea es buena, seguro que, al menos, consigues la financiación necesaria para desarrollarla.
Para acceder a la página web donde figura la convocatoria, en la cual también está el formulario que debe cumplimentarse para participar, pulsa sobre la imagen: