Los mohos son hongos microscópicos que viven en la materia animal o vegetal. Aunque individualmente son microscópicos, se agrupan en colonias que alcanzan tamaños considerables, y es entonces cuando podemos verlos. Se reproducen mediante esporas, las cuales se propagan por el aire, el agua, o a través de seres vivos. Las esporas de hongos se encuentran en suspensión en el aire distribuidas por casi todo el planeta, y se comportan como alérgenos capaces de producir alergia a algunas personas. Las condiciones óptimas para el crecimiento de los mohos son ambientes cálidos y húmedos, con temperaturas entre 20 y 40º C y humedades relativas entre el 75 % y el 95 %.
En los espacios abiertos es posible encontrarlos en campos, bosques, parques y jardines. En los ambientes domésticos se localizan allí donde existe materia orgánica: fibras textiles, pieles, papel, alimentos o plantas de interior. Dentro de los domicilios, los lugares donde más abundan estos hongos son la cocina, los armarios de ropa y calzado, cuartos de baño, bibliotecas, paredes húmedas, acondicionadores y humidificadores de aire, jardines y macetas.
En España, los hongos más importantes desde el punto de vista de su capacidad para producir alergia son Alternaria, Aspergillus, Cladosporium y Penicillium.
Hoy queremos proponeros ver un vídeo corto, de menos de 5 minutos de duración, que se recrea en el crecimiento de los mohos: un mundo microscópico que habitualmente nos pasa desapercibido, y que nos ofrece Lariontsev en su cuenta de Youtube.
Tremendamente ubicuos, los mohos están, como decíamos arriba, por casi todas partes, pero probablemente nunca los has visto de este modo. Pulsa sobre la imagen para acceder al vídeo: