Una empresa farmacéutica norteamericana ha dado a conocer esta semana que va a iniciar un ensayo clínico en seres humanos para comprobar la eficacia y seguridad de una nueva vía de administración de la adrenalina para tratar la anafilaxia: la vía sublingual.
La adrenalina o epinefrina es el medicamento que se ha mostrado más eficaz en el tratamiento de emergencia de la anafilaxia. Por ello, decimos que la adrenalina es el fármaco de elección en el tratamiento de la anafilaxia. En la actualidad, la vía recomendada para su empleo cuando la anafilaxia ocurre fuera de un centro sanitario, y mientras se espera la llegada de asistencia sanitaria, es la intramuscular, pues se ha comprobado que esa es la vía con la que se consigue un efecto más inmediato. Los dispositivos comercializados para autoinyección de adrenalina en estos casos de emergencia se utilizan por esa vía (preferentemente en la cara antero-lateral externa del muslo).
Si pudiera proporcionarse por vía sublingual, y se comprobara que el efecto es, al menos, igual de rápido, sin perder eficacia y sin más efectos secundarios, sería, sin duda, más cómodo. El laboratorio en cuestión, MonoSol Rx, con sede en Warren (New Jersey), ha desarrollado y patentado unas películas finas que se disuelven rápidamente al colocarse bajo la lengua (mediante un sistema que tienen patentado, y que llaman PharmFilm), y ya comercializa algunos otros medicamentos incorporados a las mismas. En el caso de la adrenalina, la llama Epinephrine Sublingual Soluble Film (SSF), es decir, Película Soluble Sublingual de Adrenalina.
Falta por comprobar si, efectivamente, esta vía de administración no resta eficacia, seguridad ni inmediatez a la acción del fármaco. Si pudiera demostrarse, sería, probablemente, una vía de administración más del agrado, al menos, de quienes prefieren evitar los pinchazos. Pero, aun cuando eso fuera así, en el mejor de los casos, todavía quedan años para que pueda comercializarse.
Ésta es la imagen con la que el laboratorio en cuestión anuncia sus tabletas: